El sonido del universo que una guitarra despertó

Saludé, atraído, por mi instinto, por mi necesidad, por una dulce cara de niña, que transmitía una enorme paz.

Siento que fue como hace mil, horas, minutos, segundos, días. Un problema de relatividad

Me sentí la persona más tonta

No sé cuánto pasó, sigo intentando entrar en razón,

como en este tiempo me despertó esa sensación.

Desde que ella contesto con un si

Yo quería ser, y ella estuvo de acuerdo

Amiga

Después de eso no volvimos hablarnos, hasta un tiempo luego

Mi universo se estaba acomodando

Y el de ella conspirando, para que pasara esto.

Es posible que no debiéramos, por ética, o por cosas del corazón

Yo me sentía solo y necesitaba renacer

Varias palabras al sentido me habían liquidado

pero esta oportunidad se presentó.

De ella no sabía nada, ni que esperaba, ni que esperar

Solo sé que estaba tan concentrada en lo suyo

y que tenía muchas ganas de sus metas superar.

En cuestión de horas todo se acomodó. La noción del tiempo a mi regresó

Yo con ganas de verla y ella con la misma sensación

Que se despertó,  el día que volvió a  acariciar su guitara, entre rasga y rasga algo dentro de ella surgió.

Y la emoción es mutua, y las ganas de mirarnos son las mismas

Espero con ansias, encontrarla y hacerla parte de esta galaxia, que un día se extinguió, pero hoy nuevamente despertó.

Con más ganas, con más fuerza

Con la certeza de que esta vez será mejor.