Esa es mi posición

Estoy firme en ella, aunque no lo crea,

Me levanto caigo, me muero, venzo,

Me derrota, me humilla y a mí me gusta estar en esta contienda.

¿Qué es que me gusta sufrir?

¿Qué es que me gusta que me pisotees?

¡Me encanta!

Que me entierres, que me olvides que abuses y me botes.

¿Qué tienes que me gustan tus azotes?

¿Qué es? que me enloquece el efecto que causa tu grito aturdido por la ira en mi oído,

Susurras para que todo el mundo sepa que me detestas y yo sigo dando el motivo para que el próximo encuentro sea más afectivo.

Tus manos en donde las quieras poner con esa fuerza que es tu gran destreza las espero para sentir su amor transformado en aspereza.

Firme en que te dejo, regreso como el pendejo que soy

-estoy de acuerdo no me tratas como lo merezco-

Pero eso es lo que quiero, ahí estoy.

Llego aun luego de que conmigo limpias el suelo.

Creo que hice lo correcto, pero lo pongo entre este signo de “admiración interrogante”

De rodillas llego ante ti pidiendo una vez más ese guante que me produce ese calambre hasta en la punta de alguna parte.

Esa es mi posición, bien abajo encima de tus deseos.

Solo quiero dejar de hacerlo para poder tener lo que en realidad quiero.

Podrías dejarme y abandonar nuestra monotonía, comenzar una nueva rutina sin esta, bien, acostumbrada actuación entre tú y yo.